Latin Artis, que
jugó un papel destacado durante todas las negociaciones del Tratado,
preparó para la Conferencia Diplomática de Beijing, en colaboración con
la Federación Internacional de Actores (FIA), un vídeo institucional en
el que relevantes personalidades del cine y la televisión exponían su
compromiso con el Tratado y exhortaban a las delegaciones a que
alcanzasen el mayor consenso posible en esta materia.
Estas son las frases y los rostros más representativos que pudieron ver y escuchar los acreditados en la capital china:
“Si yo interpreto un personaje, nunca lo haré igual que cualquier otro actor. El diálogo es el mismo, pero yo no soy el mismo que otro; somos diferentes y creamos algo muy único. Por eso cada actor es autor”.
“Somos el único colectivo de creadores que carecemos de un Tratado
Internacional. Una industria sin equilibrios, que no proteja
adecuadamente a sus trabajadores, está abocada al fracaso.
Lo que pedimos es poder participar, en alguna medida, de los rendimientos económicos de las obras; disponer de unos derechos similares a los que ya gozan los guionistas, directores o músicos. Los actores somos los principales interesados en que las obras audiovisuales alcancen la mayor difusión y rendimientos económicos posibles”.
“¿Por qué un actor tiene una empatía especial con el público y otro, que teóricamente es perfecto en todo lo que hace, no conecta? Es algo que es un misterio. Un misterio, por otra parte, maravilloso”.
“A medida que la tecnología y la variedad de usos se incrementan, también debería hacerlo la protección de los derechos del actor. Les urjo a que incluyan estos derechos en un nuevo Tratado Internacional. Igual que autores y compositores dependen de los ingresos por royalties para su supervivencia a largo plazo, los actores del mundo entero deben también poder beneficiarse de los ingresos derivados de la explotación de sus obras”.
“Hoy más que nunca, y ante la inevitable globalización en la producción y explotación de contenidos audiovisuales, es absolutamente necesario que los Estados miembros de la OMPI consensúen un Tratado que reconozca a actores y actrices de todo el mundo la propiedad intelectual sobre sus interpretaciones”.
“Nuestros compañeros de la industria discográfica tienen reconocidos derechos económicos y morales desde los años noventa. ¿Es mucho pedir que los actores tengan los mismos derechos?”.
El Tratado de Beijing sobre Interpretaciones y Ejecuciones Audiovisuales consta de 30 artículos que se dividen en dos grandes grupos: