El actor es protagonista indiscutible de la nueva realidad cultural que se vive en todo el planeta. El actor no sólo crea cuando construye su personaje sino que es la imagen que de la cultura de un país se percibe en el exterior, en el resto de la Aldea Global, porque el actor, además de crear contenidos culturales, es un instrumento privilegiado para su divulgación. Nos hallamos inmersos en la era audiovisual, donde la imagen se sitúa por encima de cualquier otro medio de expresión.
El actor, a su vez, es uno de los elementos más destacados de una gran industria de nuestro tiempo. La industria audiovisual es la segunda actividad económica en EEUU y la primera desde un punto de vista estratégico y sociocultural, pues este país ha exportado su modelo económico y social al resto del mundo a través de tal industria. Pero la industria audiovisual representa entre el 3% y el 6% del Producto Interno Bruto en casi todos los países desarrollados o en vías de desarrollo.
La industria audiovisual comprende tanto producciones cinematográficas como televisivas. Y, aunque EEUU ostenta un liderazgo indiscutible en la producción y distribución cinematográfica, otros países y mercados entran en liza y son muy competitivos cuando hablamos de contenidos televisivos como tv-movies, series, telenovelas y otros programas. Tal es el caso de México, España, Brasil, Colombia, Venezuela, Argentina, Chile y Perú, por citar ejemplos destacados del ámbito iberoamericano.
El VIII Foro Iberoamericano sobre
Interpretaciones Audiovisuales nuevamente reivindica el objetivo de
propiciar un lugar para el debate y el análisis de la realidad práctica y
legislativa de los derechos intelectuales de los artistas del
audiovisual en América Latina y en el contexto internacional.
Este Foro, pues, se dirige a los artistas del medio audiovisual, a políticos, estudiantes de derecho y de materias audiovisuales, juristas, managers o representantes de actores, funcionarios públicos, gestores culturales, economistas y demás estudiosos interesados en el sector audiovisual, el derecho de autor, en políticas culturales, en la diversidad cultural, etc.
Ante la emergencia global por la pandemia del COVID19 Latin Artis y sus miembros, en representación de los actores y demás artistas iberoamericanos del sector audiovisual, instamos a los distintos gobiernos nacionales a que adopten medidas urgentes en orden de paliar los devastadores efectos económicos que a raíz de la pandemia del Covid19 están sufriendo todos los artistas. Y es que el cierre de los teatros, cines, sets de rodaje y, en definitiva, la completa parálisis del sector audiovisual, ha conllevado que cientos de miles de actores y demás artistas se hayan visto privados, de manera repentina, de todos sus ingresos, con el agravante de que su precaria situación laboral los sitúa en una situación de especial vulnerabilidad y desprotección, al no tener acceso a planes públicos de pensión u otros beneficios sociales similares. En otras palabras: cada día de confinamiento en sus hogares supone un día sin ingresos.
Esta situación, además de alarmante, resulta paradójica, pues en estos días de aislamiento son precisamente sus interpretaciones las que están haciendo más soportable las interminables horas del día para millones de hogares en todo el mundo ? al tiempo que están generando importantes ingresos a determinados operadores, muchos de ellos de ámbito multinacional. Los únicos que no se están beneficiando del acceso a contenidos audiovisuales durante el confinamiento son, precisamente, sus creadores, que representan, al mismo tiempo y como se ha dicho antes, uno de los sectores más vulnerables a la crisis económica derivada del Covid19.
Muchos han sido los gobiernos que en estas aciagas horas han enarbolado el lema de no dejaremos a nadie atrás. Pues bien, los actores y demás artistas del audiovisual, con lo que representaban antes de la pandemia en términos tanto culturales como económicos y lo que representan durante el confinamiento no hay más que ver el actual consumo televisivo, están quedando claramente atrás. De hecho, y si no fuera por las pequeñas ayudas que están recibiendo de sus respectivas sociedades de gestión colectiva, muchos de ellos estarían pasando hambre. Obviamente, los recursos de las sociedades de gestión colectiva no son infinitos, y la situación demanda un esfuerzo mayor al de su capacidad.
Ante esta grave situación, desde Latin Artis hacemos un llamado urgente a los distintos gobiernos nacionales para que cualesquiera planes económicos de protección, tales como la dotación de fondos de emergencia o el establecimiento de un salario mínimo garantizada, el alivio de determinados gastos de electricidad, agua, alquiler, medidas fiscales, etc., que se conformen para paliar los devastadores efectos de la pandemia, tengan en especial consideración a los actores y demás artistas en general.
En Madrid, a 06 de abril de 2020